Confiar en la vida

No está bueno cuando dejamos de confiar en la vida. Aparece una sensación de angustia y ansiedad. La mente empieza a querer controlarlo todo, a ponerse en alerta por las dudas si pasa esto o aquello, imaginando escenarios dignos de película de terror, y va del pasado al futuro como péndulo loco, sacándonos de nuestro eje, del estado de presente.

Los miedos nos envían información errónea que nuestra mente se la cree y la toma como verdad, y ahí comienza la resistencia y el sufrimiento.

Pero ahora puedo convertirme en observadora de este viejo mecanismo de dolor, lo observo con más entendimiento, paciencia e incluso amor, y así se va diluyendo cada vez con más rapidez, y también aparece con menos frecuencia.

Les propongo que por unos 9 días confiemos en la Vida, dejemos de alimentar miedos y démosle una chance a la Inteligencia Divina para que actúe en nuestra vida. «Todo lo que necesito llega a mí».

Desde el día en el que estés leyendo esto agendate 9 días para este experimento.
Pero vas a tener que disciplinarte y poner tu voluntad en no alimentar miedos ni pensamientos negativos por los próximos 9 días y elegir confiar en la vida. Si aparecen los observo, pero elijo no darles energía.

Si te digo de hacer esto por el resto de tu vida sería bastante difícil y poco creíble… pero por sólo 9 días sí lo podemos hacer, cierto?
Te propongo entonces este desafío, a ver qué pasa….

La consciente y voluntaria decisión de ´Confiar en la Vida´ es una bendición. No se trata de una actitud de resignación, basada en una filosofía confusa y cómoda para no ver la realidad de frente.

La Confianza en la Vida se debe a la convicción de que todo lo que nos sucede y se nos presenta es una oportunidad de aprendizaje y evolución. Nos hace dirigir la mirada hacia nuestro interior, sobre todo cuando las cosas no funcionan como desearíamos, y confiar en que estamos siendo guiados, que todo el Universo nos cuida y conspira a nuestro favor.

En lugar de caer en las redes del miedo, la ansiedad e inseguridad, y querer forzar las cosas desde los deseos del ego, tratemos de permanecer centrados, atentos a los que nos muestra la Vida, tratando de captar sus mensajes; porque sabemos que nada ocurre al azar (el «azar» es una explicación simplista que nos damos cuando no somos conscientes de las leyes que rigen el Universo).

Al decidir tener esta actitud de confianza en la sabiduría de la vida, dejamos de inquietarnos, encontramos una gran paz y plenitud, y la vida nos responde a través de sincronicidades sorprendentes, por no decir mágicas…»

Bendiciones
María Laura.-
(Les recomiendo el libro El Maestro del Corazón de Annie Marquier)

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